A veces en esa tradición de haber perdido la fe hace mucho tiempo
Le viene un vahído de esperanza a uno
Como una arcada,
Un acido que ha tratado de escaparse de la intolerancia provocada en la mala digestión
Un desecho que inunda la boca que usará luego para seguir tragando, besando, hablando, mordiendo.
A veces esa inconveniente mejoría de la probabilidad de que todo cambie
Es el preámbulo de un mortificado ajuste de cuentas
Donde se prioriza a los vivos,
y se cuenta con dedicar ciertos homenajes y creación de iconos
aquellos no tan muertos, pero que pusieron empeño en la manera de ser crucificados
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